MADRES

Me ha tocado, en los últimos días, hablar del caso Schoklender en algunos medios del exterior (anoche en CNN, el lunes en la Cadena Ser, esta mañana con la Radio Nacional de Alemania). Verlo en perspectiva es shockeante: volver a vivirlo todo como si acabara de pasar. En todos lados preguntan por el asunto con dolor y tristeza. ¿Por qué paso lo que paso con las madres? ¿Cómo fue posible? La distancia, a veces sirve para mirar con precisión: Schoklender: ¿El culpable perfecto? Se preguntaba el noticiero de CNN, dando por sobreentendido el blindaje del caso por parte del gobierno. Aquí en el pantano, sigue la misma pelea fogoneada por el aparato de propaganda. Como sucede siempre entre los gritos, las voces más sensatas pasan a veces desapercibidas. La noche del martes durante la emisión del programa Palabras más, palabras menos, de Ernesto Tenembaun y Marcelo Slotogwiazda, escuche la reflexión más sentida e inteligente sobre el caso: fue de Diana Kordon, militante de las Madres desde su fundación y médica psiquiatra.
-“A mí me cuesta reconocerla porque Hebe siempre fue una mujer que tuvo una posición de principios, si vos querés, absolutamente intransigente, y yo siempre admire su principismo aunque algunas veces hemos tenido diferencias. Siempre planteo las cosas llevadas hasta su máxima expresión, y sin hacer nunca concesiones. Ella no hacia concesiones en ningún plano. Y dirigió una lucha que se caracterizó por esa intransigencia. Y siempre fue una denunciadora, una cuestionadora, siempre denuncio todo aquello que golpeaba a los hombres y a las mujeres de nuestro pueblo. Verla en esta relación, con un gobierno que ha hecho un daño terrible… ella queda entrampada en la política de cooptación de este gobierno… (el gobierno) encontró el modo de pescar necesidades populares y la enorme importancia que tenía el movimiento contra la impunidad de 35 años, y operaron desde ahí para legitimarse. Y sobre esa base hicieron esta política de cooptación que tiene como característica muy grave los silencios que impuso. En estos años hubo muchísimos hechos represivos: la desaparición de Julio López, Luciano Arruga, Rubén Carballo, los nueve muertos del años pasado – Mariano Ferreyra, Roberto y Mario López de los qom de Formosa, Bernardo, Rosemarie y otra persona más que no recuerdo del Indoamericano -, los tres pibes de Bariloche… Hubo hechos gravísimos en los que este gobierno tiene una responsabilidad histórica.
- ¿Estás diciendo que hubo una cooptación política a cambio de plata? – preguntó Tenembaun.
-Sí, creo que fue a cambio de un apoyo político que implico un silencio de hechos que Hebe nunca hubiera silenciado. El dinero después tiene efectos. Hebe sabe eso, y por eso estuvo en contra del cobro de las indemnizaciones.
-¿Qué sentís cuando dicen que Hebe estaba hipnotizada por Schoklender, que estaba engañada?
- Lo que pienso es que eso es imposible. Lo que siento es que hubiese querido que Hebe dijera otra cosa, que asumiera alguna responsabilidad… que dijera… no se “tengo que replantearme lo que ocurrió” (…) Muchos me dicen que no hay que hablar como si el daño fuera hablar.
El daño fueron los hechos que se produjeron, que fueron gravísimos. Estos hechos han producido un daño tremendo al movimiento de derechos humanos. Yo hablo desde dentro del movimiento de derechos humanos, y tengo que vencer todo lo que pasa dentro de mí para poder hablar, y enfrentar esa idea de que hablar, daña.”