K CSM
Menos 678, mas realidad....
Veamos año a año la evolución del crecimiento del PBI desde dos años antes y los 4 primeros años de cada presidencia. En el eje horizontal pongo el período (-1 y 0 son los años anteriores, pintados en gris).
Como vemos, ambas historias comienzan muy similares. Dos años de recesión y después rápida recuperación, aunque más fuerte el rebote en la gestión NK. ¿Cómo siguió la historia con la gestión de CFK y la “re” de CSM?
Continúa el crecimiento, pero se interrumpe por una crisis disparada en ambos casos por fenómenos internacionales (Tequila y Sub-prime). Luego, se retoma rápidamente el crecimiento ilustrando una clásica trayectoria de “V”.
Muchos destacan el éxito de NK en términos de inclusión social, por lo que me pregunto entonces qué sucedió con la pobreza.
Nuevamente mucha similitud. Inician con un pico muy elevado producto de la crisis y después se reduce fuertemente, aunque en este caso es más marcado en el caso de CSM. Si prolongara las trayectorias, veríamos que la de CSM recupera un poco mientras que la de CFK sigue bajando y después se estabiliza, sin lograr traspasar el núcleo de pobreza dura de alrededor de 20%.
¿Qué quiero decir con todo esto? Las políticas adoptadas en cada gestión son TOTALMENTE diferentes y no hay ninguna duda de ello. Sin embargo, en términos de resultados concretos (simplificados en estas dos variables), no veo una evidencia clara de que la súper celebrada gestión de NK haya sido mejor que la de CSM. Resulta curioso e interesante lo similares que son las trayectorias de crecimiento y pobreza. Claro que falta por ejemplo algo de desempleo, que da mejor para la época de NK, aunque también puedo agregar inflación, que fue mucho menor en la época de CSM, y así sucesivamente…
Me queda el “¿Qué pasó después?” porque todos sabemos lo mal que terminó el modelo de los 90. En pos de la comparación, lo primero que puedo decir es que la gestión K todavía no llegó a ese punto. CSM comienza en 1990 y la crisis se desata a fin de 2001, así que tenemos que esperar un par de años para ver cómo termina. Las condiciones hoy son bastante diferentes como para creer que se pueda repetir ESA crisis. Sin embargo, hay numerosos signos preocupantes para estar alerta. La fuerte apreciación real, la desaceleración de los precios de commodities y el combo atraso de tarifas, subsidios y cuellos de botella en infraestructura y energía son, como mínimo, para no dormir tranquilo. No vaya a ser que no hayamos aprendido nada de la lección.
